Atxarre, el mirador de Urdaibai

De las cumbres de los pequeños pináculos que rodean el estuario de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, encontramos la ermita de San Pedro que corona la cima de Atxarre en Ibarrangelu.

La subid a la ermita se puede hacer por dos vías; la más corta pero que requiere mayor esfuerzo es la que sube desde el barrio de Arketas, al lado de la playa de Laida; la más larga, pero más agradecida sube por el otro lado de la colina, desde el barrio de Akorda. Como visitante frecuente a este espectáculo natural, mi recomendación es tomar la segunda opción, me lo agradecerás.

Desde la cumbre se puede disfruta del estuario inferior y observar como el cambio de mareas transforman el paisaje de la ría: con la subida de la marea las playas desaparecen, pero tan pronto como empieza a bajar emerge el espectacular laberinto del arenal.

Vistas del estuario inferior desde la cumbre de Atxarre

Además d su atractivo, cabe mencionar la importante biodiversidad de los tupidos bosques siempreverdes que cubren las lomas de esta pequeña cumbre, siendo el más extenso de la cornisa cantábrica. Se trata de un vestigio del clima templado que disfrutamos en otra era, de origen mediterráneo, y su singularidad lo hacen parte importante del conjunto de especial interés del paisaje de Urdaibai. La encinas que conforman este espeso bosque son jóvenes, ya que hace mucho tiempo toda la loma sufrió un catastrófico incendio, que por lo que dicen las malas lenguas pudo ser provocado, entendemos que para poder aprovechar la extensión de las tierras. Pero lo cierto es que la encina es de las pocas especies, junto con el el madroño o el laurel, que puede sobrevivir en este tipo de suelo calizo, poco desarrollado y secos, ya que no tiene capacidad de retener el agua, el cual se filtra directamente al subsuelo y lo convierten en suelo no aptos para el aprovechamiento agrario o foresta. Gracias a ello han llegado hasta nuestros días.

Las pequeña colinas que formas el paisaje de Atxarre se trata de pequeñas colinas colinas cónicas, que en el lenguaje científico de la geología se le conoce como modelo pincular, o usando analogías que tanto les gusta, un cartón de huevos, por su similitud en la forma. Esta forma tiene origen tropical, y es de hecho típico de las regiones tropicales. Estamos hablado entonces de la Euskadi Tropical, y no porque en verano el tiempo parezca más propio de Costa Rica, sino por se estos cumbres herencia de cuando teníamos ese clima.

Atxarre tiene origen arrecifal, y en su interior esta lleno de agujeros, que volviendo a las analogías, es como un queso gruyer. El proceso de creación de este tipo de montañas, que no nacen de la colisión de placas, sino de la erosión del aire y del mar se llama “Modelado Kárstico” y por si te interesa profundizar, puedes hacerlo visitando la Guía de lugares de interés geológico de Urdaibai.

Pero antes de despedirme y sugerirte seguir descubriendo Urdaibai con las cositas que te cuento, creo que te va a interesar conocer el porqué de una ermita en lo alto, que además no es la única de Urdaibai, y que curiosidades tiene.

San Pedro Atxarre desde la mar, con parte de la isla de Izaro en primer plano

Su nombre ya nos indica que tiene una estrecha relación con la mar, ya que San Pedro es un santo marinero, y su elección está respaldada por una leyenda. así como lo es municipio La advocación a un santo marinero, como lo es San Pedro,nos sugiere la estrecha relación de Ibarrangelua con la mar y su elección también está respaldada, como no, por una leyenda.

Esta leyenda cuenta que en Ibarrangelu había una gran piedra con un agujero en forma de pié, atribuido por la gente del pueblo a San Pedro. Parece ser que este santo descendió del monte de Atxarre dando dos pasos, dejando una huella en el barrio de Armendua y otro en Ibarrengelu.

La verdad que será por leyendas en Urdaibai (ya te iré contando más, ten paciencia). Hay otra que dice que en una pequeña zona despejada del frondoso bosque encinar, llamado hoy en día Dantzaleku, lugar de baile) se realizaban los akerrales de la zona. Así que ten mucho cuidado.

Aritzatxu, una cala con historia geológica

Al resguardo de los acantilados que la rodean, Aritzatxu es otra de las joyas de nuestro litoral, tanto por su belleza como por su valor natural.  Es innegable que su encanto haga de este lugar la niña de los ojos de los bemiotarras, quienes durante el verano trasladan su lugar de reunión con la cuadrilla del puerto o del parque la Lamera a esta pequeña cala.

Playa de Aritzatxu, Bermeo

Tampoco es indudable su valor natural, y más concretamente el geológico. Si observamos desde el pequeño mirador que hay antes de la bajada final que nos conduce a la cala, llama la atención el enorme peñón picudo que vemos en el costado izquierdo de la playa.  Si nos acercamos a ella veremos que tiene fósiles de animales como la esponja o coral. Primera pregunta ¿Esponja, coral? Sí, este gran bloque tiene su origen en la Euskadi Tropical. Si nos fijamos con más detalle veremos que la roca está compuesta también por materiales muy finos, propios de fondos marinos muy profundos. Segunda pregunta ¿Pero si los arrecifes solamente son capaces de sobrevivir en zonas poco profundas, cómo es posible que también tenga materiales finos propios de fondos profundos?

Para responder tenemos viajar 100 mil años atrás, a finales del Cretácico inferior, al momento en el que el Golfo de Bizkaia se estaba abriendo. Su expansión dio lugar a que se produjeran fallas que compartimentaban el fondo del mar en zonas submarinas elevadas, donde el mar tenía poca profundidad y se desarrollaban los arrecifes, y zonas muy profundas.

Playa de Aritzatxu, Bermeo (vista del Olistolisto)

Entre ambas zonas se situaban empinados escarpes por los que caían bloques de arrecifes procedente de las zonas elevadas, que se desprendían en momentos de inestabilidad y quedaban depositados entre los materiales del fondo, al pie del talud. Millones de años después, la erosión de los materiales ha dado como resultado la caprichosa morfología de la playa de Aritzatxu. A este gran bloque los geólogos los llaman Olistolito: Olisto (piedra) Lito (grande). Si os interesa profundizar más sobre este fenómeno geológico os invitamos a pinchar aquí.

Arribolak, un paraíso submarino

En los límites de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, encontramos este paraíso marítimo donde disfrutar de la vida marina de nuestras costas. En total son 5km de costa, de los cuales se suele frecuentar la zona con acceso por carretera. Su anchura, como toda nuestra costa, varía según las mareas oscilando entre 10 y 15 m de anchura.

Antiguamente existía un muelle de descarga desde el cual zarpaban los arcos rumbo a la gaviota; actualmente esa comunicación se hace por medio de una tubería submarina visible bajo el agua.

En sus ricas aguas, al resguardo del cabo de Matxitxako, se puede disfrutar de un fondo rocoso que se prolonga hasta 30 m desde la costa con numerosas grietas que dan cobijo a innumerables especies como el cabracho, lábridos, blénidos, espáridos, cefalópodos, crustáceos, etc. Destaca entre ellos la presencia del pez ballesta, una especie poco frecuente en la costa vasca. A partir del fondo rocoso comienza un vasto arenal con presencia de peces planos como rayas y pastinacas. Desde ese mismo arenal, hacia el este, a 1400 m de distancia, se encuentra el barco Mina Mari; otro lugar recomendable para la práctica del submarinismo. Arribolas es importante también para a la reproducción de diferentes aves marinas en el entorno, siendo una zona ZEC (Zona de especial Conservación) y ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves).

Playa de Arribolak, Bermeo

Además de ser un lugar ideal para disfrutar de la biodiversidad de nuestro fondo marino, es un excelente lugar para disfrutar de un paisaje geológico extraordinario.

Su nombre en euskera es una descripción literal de su morfología: Harribolak, Harri (piedra) bolak (bolas). Pero, ¿por qué tiene piedras y no arena?. La respuesta está en la energía que soporta de la mar. En este caso, las piedras redondeadas que encontramos a lo largo de Arribolas nos indican que el embate de la mar en esta playa tiene mucha fuerza y esto hace que las mareas se lleven los materiales más pequeños, como los granos de arena, y a su vez vayan, poco a poco, erosionando y redondeando las rocas que caen de los acantilados.

A los pies del Cabo de Matxitxako, en el acantilado, encontramos también un trozo de la historia geológica que incluye algunos aspectos muy significativos de la geología vasca. Desde Arribolas es posible observar una panorámica del conjunto de rocas denominado Grupo Flysch Negro del cabo Matxitxako, que pertenece a los Lugares de Interés Geológico de Urdaibai: aquí tenéis más información.